Adiós, amigos
Se nos fue JESUS FRANCO. Se nos fue un cineasta al margen. Un creador sin límites. Ahora una leyenda. ¡¡¡Larga vida a tu espíritu, maestro, aquí y allí!!!
También nos dejó -vaya semanita- MARIVI BILBAO, a la que conocí en el rodaje del corto AMOR DE MADRE. Aquí lo rescato como homenaje. Para mi fue una experiencia vital esencial, aprendí cómo no hay que ir a un rodaje para cumplir bien como ayudante de dirección. Fue un master absoluto y un regalo conocer a MARIVI, con esa energía ejemplar y contagiosa. Descansa en paz (y de puta madre), amiga