Menos lobos
He visto LOBEZNO, hace ya unos días, en pantalla grande, por si hay suspicacias. Me lo he pasado bien con el mutante más popular de la Marvel. La película empieza y acaba con un ritmo trepidante, con un clímax destacable. Funciona bien como precuela de la saga cinematográfica de X-MEN, casa perfectamente, supera a su fallida tercera entrega (la puse a caldo AQUÍ) y despliega una batería de divertidos guiños para el aficionado a los tebeos. Hugh Jackman confirma que ha nacido para encarnar a este personaje, un héroe de acción letal, que no se detiene ante nada. Sin embargo, la sensación cuando acaba el espectáculo trufado de efectos especiales es algo extraña. Nos han contado sin más lo que esperábamos. Nos lo han contado bien, que no es moco de pavo visto lo que hay, pero no hay riesgo alguno, no hay realmente emoción más allá del entretenimiento. Expediente correcto, por tanto, pero no existe, por ejemplo, la sobriedad de los capítulos firmados por Bryan Singer, no hay épica, no convence como IRON MAN, no es contundente, por comparar el filme lobuno con otros en su línea de trama superheroica. Ya me dirán, infraseres