Otro cine muerto
Ha cerrado sus puertas el Palacio de la Música de Madrid tras 82 años de funcionamiento. Continúa la sangría de salas en la Gran Vía, que está perdiendo todo su encanto gracias a la globalización. Los centros de las grandes ciudades, vayas donde vayas, son todos iguales.
Desde que, simpáticamente, el Ayuntamiento de Madrid autorizó en enero de 2005 el cambio de uso de los edificios singulares siempre que se respete la fachada, han sido muchos los cines madrileños que han dejado de proyectar . De los 13 que había en la Gran Vía en el 2000, sólo quedan tres: el Palacio de la Prensa, el Capitol y Callao. El resto se ha reconvertido en putas tiendas de ropa con música bakala, cafeterías de plexiglás y demás negocios sin gracia que rinden pleitesía al consumismo.
Dentro de poco ni estrenos ni alfombra roja ni nada en la Gran Vía. De hecho, con la premiere de LOS CRONOCRIMENES nos vamos esta noche al Palafox. Atención a ESTA IMAGEN IMPAGABLE.