Se acabó. El EVASION, suplemento del periódico EL CORREO, donde llevo colaborando cerca de 12 años, cierra sus páginas. Algunos de los artículos de mi cosecha sobre cine y cómic, que podéis leer AQUI o AQUI revolviendo, también se publicaban en otras cabeceras de Grupo Vocento. En su lugar llega el GPS, con páginas en color, más publicidad y esas cosas, y siguen contando conmigo. Renovación.

Os dejo con las líneas que he escrito para el último número, publicado hoy Me ha tocado ponerme nostágico y firmar la despedida y cierre

DOCE AÑOS DE EVASIÓN

Ha llovido mucho desde la salida del primer EVASIÓN, el 17 de febrero de 1995. Una primera entrega recibida con júbilo por un sector del público que ansiábamos un suplemento de ocio y cultura para gente joven en las páginas de EL CORREO. Otras grandes cabeceras ya lo tenían desde hacía tiempo, ocupando un hueco importante que, en gran medida, cubrían hasta entonces los fanzines, esas publicaciones creadas por y para aficionados, sin ánimo de lucro, que posteriormente dieron lugar al auge de la prensa gratuita musical y de tendencias, y al actual fenómeno de la blogosfera.

El primer EVASION abría con un concierto de REM en San Sebastián. También incluía otros temas musicales, de cine y tiempo libre. A diferencia de otros suplementos de similares características, EL CORREO apostó desde un principio por contenidos no necesariamente comerciales, uno de sus mayores atractivos. En aquellas primeras entregas no tuve la suerte de participar, apenas daba mis primeros pasos escribiendo en fanzines como “Subterfuge”, “2000 Maniacos”, “Quatermass” o “La Comictiva”, pero, no tardando mucho, recibí la llamada de Carlos Benito, coordinador del suplemento por aquel entonces: estaban buscando a alguien que escribiese de tebeos.

Antes de llegar a las páginas de EL CORREO me vi escribiendo accidentalmente en fanzines varios, en pleno boom de este tipo de publicaciones en los años noventa. Nunca pensé que podía dedicarme profesionalmente a esto de escribir, en el fondo soy un intruso –documentado, eso sí-, pero el EVASIÓN me dio la oportunidad de hablar de cómic, una de mis grandes pasiones, mucho antes de que se pusiera de moda en los papeles. Ahora el noveno arte vive un momento dulce mediáticamente hablando, pero no siempre fue así. Ha estado complicado colar el tema en los grandes medios, y debo agradecer la suerte de haber publicado artículos impensables sobre mis tebeos favoritos gracias a estas paginas.

He entrevistado a cortometrajistas, fanzineros, blogueros, actores y cineastas emergentes, a dibujantes de historietas, editores He escrito de fanzines, libros, festivales, exposiciones He podido hablar en un gran medio tanto de temas mainstream como underground, lo cual es un lujo en los tiempos que corren.

No me puedo quejar. No podemos quejarnos. Hemos podido dar a conocer a un mayor público, desde hace más de una década, esa otra cultura que no siempre goza de la difusión que se merece.

Y el cómic seguirá estando presente en las páginas de EL CORREO, con o sin EVASION, y lo mismo podemos decir de los temas de otros compañeros: arte, música alternativa, rock vasco Si algo ha caracterizado al EVASIÓN es su capacidad para aglutinar temas de variados pelaje, comerciales o subterráneos, adelantándose en ocasiones a otras cabeceras, marcando tendencia.

El EVASIÓN se va. Larga vida al EVASIÓN. Ahora llega el GPS. Renovarse o morir. Echaremos de menos la tira de Rober Garay, pero tendremos otras cosas. Al tiempo.

Auténtico orgasmo retinal el de anoche, con la proyección en digital de BLADE RUNNER con motivo de su 25 aniversario en el pantallón del Auditori. Lágrimas en los ojos al escuchar la música de Vangelis como banda sonora de esas poderosas imágenes que siguen manteniendo su fuerza a pesar del paso del tiempo Una catarsis colectiva brutal. Y eso que el pase era a la 1 de la mañana. Pero el cine repleto, a rebosar, todo muy emotivo. ¡Bien por Sitges! ¡Todavía podemos creer en la magia del cine!

Esta es la sensación que tengo tras varios días en el festival de Sitges Déjà vu, déjà vu, déjà vu!!!

Todas las películas me recuerdan a otras, a algo ya visto, algunas de un modo escandaloso

De momento pocas flores y mucha bilis, con lo cual voy a esperar un poco antes de empezar a escribir tonterías, a ver si veo luz al final del camino

Por cierto, ya es noticia pronunciable: Ibáñez viene este año al Salón del Cómic de Getxo. También vendrán Man, Miguelanxo Prado, Eduardo Risso, Andy Riley (el de los conejitos suicidas), Manel Fontdevila, Mauro y millones de TMEOlaris, entre otros autores

Seguiremos informando

Un lujazo, compañeros, compartir con mi venerado Cronenberg una estupenda edición en DVD.

Ya lleva días en las tiendas la Edición para Coleccionistas de EL ALMUERZO DESNUDO, que cuenta, entre los extras del doble DVD, con SNUFF 2000, anunciado en portada.

Por fin SNUFF 2000 en DVD, a todo trapo. ¡Corriendo a comprarlo!

Ni que decir tiene que tanto M.A. Martín como yo estamos más que encantados al ver nuestros nombres al lado del maestro Cronenberg.

Aprovecho para agradecer al personal implicado en el cortometraje, que tiene un tiempecito ya, su colaboración indispensable para convertir de las viñetas a los fotogramas el controvertido cómic. Ahora, a ver si hago algo nuevo de una santa vez que estoy quedando como el culo.

La edición es de AVALON (¡gracias por el interés y esfuerzo, Enrique Co.!) ¡Estoy contento!

Y me vuelvo a ir. Mañana mismito

Prometí en su día una segunda parte del POST en el que hablaba de Sitges 2006, y, con la tontería, ha pasado un añito sin que haya cumplido con lo prometido Y van

Tenía algo escrito desde entonces, que aquí rescato con algún añadido. A ver si este año puedo postear algo en el día a día para quitarme la espinita. ¡Vuelta a Sitges! ¡A ese pedazo de sala de cine!

Muchas películas vistas el pasado año ya están estrenadas, o no se estrenarán nunca y habrá que darle a la mula. El título del que hablo a continuación igual hasta ya se ha estrenado, pero lo he borrado de mi disco duro cerebral

-Grimm Love Story. En fin, salí indignado de esta recreación pastelosa de la historia del carnicero de Rostov, ese germano loco que se papeo el pene convenientemente guisadito de un incauto reclutado por Internet. Aquí la cosa se explica con ínfulas de imitar la genial Spider del gran Cronenberg, con flashes de la infancia y alegre juventud de los protagonistas antes del acto de amor caníbal. Todo ello con insertos de una estudiante de Erasmus que analiza el fenómeno para un trabajo de clase, la peor parte del fallido conjunto. El filme recurre a imágenes poéticas de manual (según me dicen el mismo que ha utilizó Banderas para su nueva película). Todo muy intenso, con frases tipo: “Quiero sentirte dentro de mí”, “Estamos hechos el uno para el otro” o “Estoy preparado para hacerlo” mientras preparan la cena fálica y cosas así. No quiero explayarme más, que noto el sarpullido de la alergia en mis mejillas. Y la estudiante siendo absorbida por el lado oscuro del tema despeinándose, desordenado su habitación, corriéndosele el rimel de los ojos… ¡agh! Un relato tan sórdido, contado como para un pase en un monasterio. ¡Y va y le dan premios!

***Resumiendo todo lo demás, que hasta aquí tenía poco más escrito (ja, ja!!!), y aún no he hecho la maleta, puedo decir que lo mejorcito de Sitges 2006 fue EXILED, una especie de remake a la oriental del Wild Bunch de Peckinpah. De cintas como Scoop, Brick, Los abandonados, La fuente de la vida, Black Book o La Hora Fría ya he hablado por aquí.

Y me quedo tan ancho

Viendo este curioso videoclip musical a altas horas de la madrugada en la MTV 2 me he acordado de un texto escrito de hace mil años que aquí rescato aprovechando la coyuntura

LOS CONCURSOS (Y EL DEPORTE)  MATAN

Im-presionante. Enciendo la tele para devorar el telediario mientras zampo, practica habitual en mi quehacer diario, y me encuentro un documento impagable. En un pueblo de estos perdidos por el mundo, de cuyo nombre no quiero acordarme, sus habitantes veneran un concurso llamado “La Carrera del Queso”. El juego consiste en reunir a varios lugareños, probablemente con pocas luces, en lo alto de una abrupta pendiente. Un sujeto tira un queso rodando, que va cayendo cuesta abajo, y los participantes tienen que seguirlo a toda pastilla y llegar a la meta antes que el suculento alimento. Evidentemente, los intrépidos concursantes también caen rodando, dándose unas costalazos tremebundos. Ostia para aquí, ostia para allá. Algunos botan y se golpean contra los montículos del barranco de manera que duele, en serio, a cualquiera que lo esté viendo. Y todo este delirante espectáculo nos lo ponen a la hora de comer, claro, para que veamos lo cafres que son también en otros países. Miembros dislocados, heridos, sangre Y la gente aplaudiendo entre risas.

Lo descrito me recuerda a una película mítica del género gore, “2000 Maniacos”, en cuyo sangriento argumento unos turistillas de tres al cuarto llegaban a un pueblo y eran masacrados con diversos juegos ante el descojone de los pueblerinos, unos cachondos de cuidado.

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