Planeta enfermo
El cómic sigue aportando obras inquietantes a la cultura popular contemporánea. Daniel Clowes, uno de los dibujantes más importantes de la escena independiente americana, cautiva al lector con una obra personal que refleja la realidad con destellos de surrealismo.
Clowes ilustró el cartel de Happiness, el golpe al sueño americano perpetrado por el reivindicable cineasta Todd Solondz. No es de extrañar: los personajes patéticos que protagonizan la película parecen extraídos de las viñetas de Eightball, David Boring o Como un guante de seda forjado en negro, obras clave del tebeo alternativo de los últimos tiempos. Su autor esgrime una peculiar imaginería cáustica plagada de referencias iconográficas a la cultura basura, los filmes de culto y las series de televisión. Su visión perturbadora, encauzada en una rica variedad de registros estilísticos, retrata músicos decadentes, mujeres fatales, superhéroes de postal, marcianos estrambóticos, jóvenes inadaptados, mentes deformes y seres atormentados. Una fauna de lo más esperpéntica, tan entrañable como odiosa, fiel reflejo de la sociedad moderna. Todo puede tener cabida en el planeta enfermo modelado por Clowes, incluso una crítica a la profesión que le da de comer. Atentos a las tribulaciones de Pussey, un dibujante de cómics que se cree un auténtico genio mientras permanece en el más triste anonimato.
Ghost World es el álbum más conocido de Clowes, una visión arrebatadora del despertar de una adolescente que descubre, muy a su pesar, que no es como los demás humanos. Dio lugar a una versión en celuloide, más amable, dirigida por Terry Zwygoff, responsable de la reciente Art School Confidential, también basada en una historieta de este excelente cronista de las vidas enfermizas de aquellos individuos que no encuentra su sitio en el mundo. Actualmente escribe el guión de la próxima película del genial Michel Gondry.
(columna dominical de EL CORREO rescatada)